Después de sufrir con los muertos toca reírnos con cualquier animalada, así que hoy traigo una película de lo más entretenida: falsas apariencias (the whole nine yards).
El dentista Nicholas Oseransky (Oz para los amigos) no está de suerte: su matrimonio es una farsa, el índice de suicidio de los dentistas es elevado y para colmo, el tulipán, un famoso asesino a sueldo, se acaba de mudar al lado de su casa. A partir de entonces Oz descubrirá que no todo es lo que parece ser en esta vida.
La crítica
La cinta cuenta con gran variedad de actores reconocidos (o simplemente los has visto antes SEGURO) como por ejemplo Matthew Perry (Chandler en la exitosa serie de televisión Friends), Michael Clarke Dunkan (aquél presidiario grandullón de la película The Green Mile) y un tal Bruce Willis (¿hace falta que diga en que películas ha salido?).
Después de haber leído la información previa, nos encontramos delante de un filme que empieza con buen pie aunque no acaba siendo lo que uno se espera un principio. A medida que va avanzando la cinta te encuentras que, aunque se trate de una comedia, su trasfondo no es más que el romanticismo (además de un toque de cine negro) y eso la acaba haciendo algo lenta, larga y aborrecida. Pero no por ello he visto con malos ojos dicha película, porque hay muchísimos trozos en los que me he reído a carcajada suelta, algo que no se consigue fácilmente con este tipo de humor.
Asimismo, hay que decir que está muy logrado el dúo Perry-Willis porque ambos no dejan de sorprenderte con algún que otro comentario o gesto, cosa hace que cada personaje sea clave en la película. Ambos son dos personajes totalmente contradictorios: Willis encarna a un matón profesional que no deja ningún cabo suelto y lo hace todo a la perfección, mientras que Perry es un pobre desgraciado que no sabe como actuar en situaciones comprometidas o tan solo, algo más complicadas. Eso hace que la película cobre un gran atractivo cara al espectador a causa de la fabulosa combinación de ambos personajes (y ambos actores, claro). Además que como de costumbre, Bruce Willis te deja con la boca abierta con esas deliciosas frases que va soltando, que llevan por igual la arrogancia y la naturalidad incrustadas en cada palabra (además del toque humorístico de la situación).
Definitivamente, si lo que quieres es pasar un buen rato, ver como el amor puede con todo (¿de verdad he dicho yo eso?) o simplemente, ver una película de matones un tanto (mucho) original, hazte unas palomitas y mira esta cinta. Si no es así, ya sabéis, no lo hagáis!
Información de más
- La película tuvo una gran recepción ante el público, recaudó un total de más de 106 millones de dolares.
- En consecuencia, se hizo una segunda parte llamada: más falsas apariencias. En el caso del título original: The whole ten yards.
- En Bollywood parodiaron a la cinta (entre otras) con la película titulada: Awara Paagal Deewana.
Nota final: 6
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