Lo ideal para considerarse a uno mismo un buen cinéfilo sería el poder ver las películas a ciegas, es decir, sin conocer apenas nada de la historia ni haber visto imágenes o trailers. Desgraciadamente, ¿quién va a resistirse a poder ver un adelanto de las imágenes de aquella película que con tanta ansia esperamos? Todos acabamos dándole al play para ver el último trailer recién estrenado y para cuando llega la película a las pantallas sabemos demasiado de ella, debido en gran parte a esos trailers demasiado explícitos a la hora de explicarnos el argumento casi en su totalidad.
El trailer de 'Una cuestión de tiempo' no es una excepción. Nos muestra escenas típicas de comedia romántica que nos hacen pensar que no nos van a sorprender en absoluto con el argumento. Y ahí está el truco, el gran acierto. Porque por una vez un trailer nos ha engañado. Si, lo que vemos es una comedia romántica de las de siempre, pero... ¿es realmente la historia que nos quieren vender en los trailers y la publicidad la verdaderamente importante de la película?
¿De qué va?
El trailer de 'Una cuestión de tiempo' no es una excepción. Nos muestra escenas típicas de comedia romántica que nos hacen pensar que no nos van a sorprender en absoluto con el argumento. Y ahí está el truco, el gran acierto. Porque por una vez un trailer nos ha engañado. Si, lo que vemos es una comedia romántica de las de siempre, pero... ¿es realmente la historia que nos quieren vender en los trailers y la publicidad la verdaderamente importante de la película?
¿De qué va?
El día que cumple 21 años el padre de Tim (Domhnall Gleeson) le revela el gran secreto familiar: los hombres de la familia son capaces de viajar en el tiempo. Sorprendido por la revelación y una vez comprobado que lo que su padre le cuenta no es un delirio sino que es totalmente cierto, Tim empieza a utilizar sus nuevas habilidades para conseguir conquistar a Mary (Rachel McAdams), la chica de sus sueños.
La crítica
Richard Curtis nos tiene muy mal acostumbrados. Sus guiones para TV ('The Black Adder', 'Mr. Bean') y para el cine ('Cuatro bodas y un funeral', 'Notting Hill') son memorables. Pero es que después decidió debutar como director con 'Love Actually', la película que cada Navidad, con perdón de 'Qué bello es vivir', hace que dejemos cualquier cosa que estemos haciendo para sentarnos enfrente de la TV y disfrutarla una vez más.
La historia que ahora nos presenta es mucho más que el simple chico conoce chica - chico se enamora de chica. Ahora se introduce la variable de chico viaja en el tiempo para conquistarla. Podríamos decir que estamos ante una mezcla de 'Atrapado en el tiempo' y 'Regreso al futuro'. Y eso es lo que vemos durante sus primeros minutos.
El elemento de viajes en el tiempo podría resultar peligroso. Un motivo para poder enlazar todas las historias y dar sentido a cabos sueltos dentro del guión, simplemente con la excusa de retroceder en el tiempo para arreglar el error. Pero Richard Curtis lo utiliza sabiamente. Evidentemente es el motor de la película pero sin llegar a ser lo más importante ya que lo que verdaderamente le interesa al director es mostrarnos la humanidad de los personajes.
Curtis nos presenta una familia con la que es imposible no empatizar. Todos son encantadores y maravillosos. Es más, cualquier personaje que aparece en la película es así de encantador, por muy excéntrico o lunático que parezca a primera vista.
Tal vez esta sea su única pega, el mostrarnos a unos personajes tan entrañables, con los que conectamos rápidamente y que nos hacen creer en la posibilidad de viajar en el tiempo pero no que nos cuestionemos si estos continuos viajes para alterar sus acciones en pos de un beneficio propio son moralmente aceptables.
El protagonista de la historia, Tim, está interpretado impecablemente por Domhnall Gleeson (hijo del actor Brendan Gleeson), que encarna perfectamente el papel de chico normal. No es un guaperas típico ni tampoco un freak introvertido. Es simplemente un tipo normal. Tal vez el más normal de toda la película, que se enamora perdidamente del personaje de Rachel McAdams, que tiene a su cargo un papel bastante plano. No deja de ser la chica adorable de la que todos nos enamoraríamos y poco más.
Pero el verdadero triunfador del film es Bill Nighy, fantástico en el papel de padre de Tim, un rol a priori secundario pero que acaba siendo más protagonista de lo que en un principio pensamos. Sus escenas cotidianas con su hijo, jugando al ping-pong o tomando te en la playa, son las mejores de toda la película. Ahí Richard Curtis demuestra que su verdadera intención no es tanto mostrarnos la historia de amor de Tim y Mary sino que la historia importante para él es la de esa familia, y en especial la relación de ese padre y su hijo.
Todas sus escenas juntos son entrañables, pero sin duda la escena final es la que se lleva la palma. Una escena que debería figurar desde ahora mismo como una de las más hermosas representaciones del amor que un padre puede profesar a su hijo.
Durante toda la proyección somos testigos de esas conversas paterno-filiales pero los hechos que acontecen al final (y que obviamente, no revelaremos...) hacen que cada detalle y cada mirada cobren un sentido especial.
'Una cuestión de tiempo' acaba siendo no tanto una película sobre encontrar el amor verdadero sino una declaración de amor por parte de Richard Curtis a la familia. Una película personal que nos hace querer valorar más los días de nuestra vida, por más que sean monótonos y aburridos.
Curtis ha declarado que ésta será su última película, que prefiere pasar más tiempo con su familia y amigos que no tener todas las preocupaciones que conlleva dirigir un film. Para un director con sólo 3 películas en su carrera parece difícil de creer pero no podemos negar que si realmente ésta es la razón del abandono definitivo de la silla de director por parte de Richard Curtis, lo ha hecho despidiéndose por todo lo alto, con una declaración de amor a todos aquellos a los que él quiere y aprecia.
Información de más
- El rodaje tuvo lugar entre Londres y Cornwall
- Zoey Deschanel era la primera candidata para el papel que finalmente interpretó Rachel McAdams
Nota final: 8
A mi me encantó. Coincido bastante con la crítica. Es una película que sorprende, porque te ofrece más de lo que a priori vemos en el trailer, y va más allá de la típica comedia romántica. Una de esas historias que te hace salir del cine con una sonrisa en la cara.
ResponderEliminarOs dejo la mi reseña: http://bit.ly/17eozzS
Un saludo!! ^^
Muchas gracias Naiara! Pasados unos días, sigo encandilado con la película! Genial tu crítica!
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